El Grupo Municipal Andalucista volvió a preguntar al alcalde sobre las pruebas de radiación que la Consejería de Salud le ha indicado que realice hace casi cuatro meses y que aún siguen sin llevarse a caboLa Candidata Andalucista a la Alcaldía de Alcalá de Guadaíra, Lola Aquino ha denunciado que los vecinos de la calle Sor Petra llevan meses esperando que el Ayuntamiento cumpla con lo ordenado con la Consejería de Salud.
Cabe recordar que estos vecinos llevan más de un año protestando por la instalación y puesta en marcha de un transformador eléctrico, junto a varias viviendas. Tras la movilización vecinal, la Consejería de Salud envió un oficio al Ayuntamiento en el que le instaba a hacer una serie de mediciones conforme a la ley para comprobar las radiaciones electromagnéticas del citado transformador. Con ellas la Consejería de Salud quiere comprobar si esa instalación es o no inocua para los vecinos.
En octubre, casi cuatro meses después, estas mediciones siguen sin realizarse. Lola Aquino lamenta que “el Equipo de Gobierno de Limones se olvide de sus propios vecinos y además no de cumplimiento a una orden de la Consejería de Salud”.
Durante estos meses, el Partido Andalucista, a través de su Portavoz municipal Francisco Rubio, ya preguntó a este respecto en el pleno del mes de julio. Tras la falta de respuesta municipal, Rubio ha vuelto a preguntar por ello durante el mes de septiembre, sin que por el momento obtenga tampoco respuesta alguna.
Además, Francisco Rubio le recordó al alcalde que el Consistorio no tiene la obligación de asumir el coste de la realización de las pruebas, por lo que instó a Limones a obligar a la empresa titular del transformador a que las haga.
Esta es una guerra larga que los vecinos afectados llevan soportando durante mucho tiempo contra las distintas administraciones, con movilizaciones, escritos, propuestas y que no han podido evitar que el transformador finalmente se instale.
Para Lola Aquino con la carta de la Consejería de Salud, “la pelota está en el tejado del Ayuntamiento, que concedió licencia de obra, y que tiene la obligación legal y moral de hacer que se realicen esas pruebas para garantizar al cien por cien la inocuidad del trasformador y la salud de los vecinos”.